Lola y Tabatha al son de un cafe

Estaba el otro día pensando en la propuesta de múltiples fans de esta historia, sobre el hecho de hacer el incesto entra la tía Bárbara y Pedro Pablo, su sobrino. Le pregunté a un colega que tan posible sería este hecho, trayendo al contexto el hecho de que la señora Bárbara inició como una representación de ciertas situaciones de la realidad. Él me dice, la señora se salió de esa realidad hace rato, pero tal vez en este loco país de dementes eso no suene tan rayado. Estudiando múltiples anécdotas aquel me hablaba de que las damas de esa edad suelen ser algo irracionales. Todo tiene que ver con un glamour tenue que aparece en su juventud y va desapareciendo cuando las oportunidades escasean con los años. Claro, generalizar no aplica a muchas cosas, a todas, eso digo; pero en general es una época de descaro. Sí, hay varias cosas, comentarios de pasillo, chismes, que apoyan este tipo de cosas; que vienen del trabajo o de lo que se ve alrededor; pero tal vez sería prudente conservar a la dama en cuestión dentro de un cálido ámbito de realidad. Luego apareció su sobrina Lola, esa majestuoso masa de carne, comparada solamente con las estrellas en el firmamento, y la presunción se hizo posible. Ese pasado turbulento que le ofrece Lola a la historia es el picante que tal vez esto necesitaba. Gracias Supertito ( supertito.deviantart.com ) por permitirle a esta historia dar un giro.